De un tiempo para acá; con la explosión de los videojuegos de computadora y algunos programas de diseño, las portátiles de gama media o alta poseen una tarjeta gráfica dedicada. Las cuales a primera vista sirven para optimizar los gráficos asociados a estos juegos o programas. Sin embargo, realmente pocos conocen si su equipo cuenta con una de estas tarjetas, de qué tipo es, cuál es su función y, por último, no saben cómo activarla.
A lo largo de este articulo te diremos todo lo que debes saber sobre la tarjeta gráfica dedicada del portátil. O, por otra parte, para que adquieras y puedas activar el complemento adecuado que te permita mejorar el rendimiento de tu computador. Vayamos poco a poco, resolviendo cada una de las dudas que podrías tener en cuanto a la tarjeta de video dedicada.
¿Qué es una tarjeta de video dedicada?
Una tarjeta gráfica dedicada o tarjeta de video dedicada es una expansión de la placa base del ordenador que procesa la información del CPU. Específicamente, su función es convertir la información del CPU para que pueda ser representada gráficamente mediante un dispositivo de salida. Bien sea un monitor, una TV o un proyector.
En otras palabras, la tarjeta de video controla la información gráfica y cómo ésta se verá en tu monitor. Puede ser que tu equipo posea una sola tarjeta de video integrada o que posea dos tarjetas de vídeo: integrada y dedicada. Esta última, es un complemente muy codiciado por gammers y diseñadores, ya que puede aumentar considerablemente la calidad de juegos y programas especializados.
Características que afectan el desempeño de las tarjetas gráficas o tarjeta de video
Las características más resaltantes de un ordenador asociado a su tarjeta de video, para definir su calidad y capacidad, son las siguientes:
Unidad de refrigeración: Es importante que tu ordenador posea un buen sistema de refrigeración, sobre todo en aquellos equipos que tienden a calentar considerablemente. El calentamiento excesivo de la tarjeta de video (integrada o dedicada) puede generarte problemas y deficiencias en su rendimiento.
Fotogramas por Segundos: también conocidos por sus sigas como FPS, son la cantidad de imágenes que puede procesar la tarjeta de video en un segundo. Normalmente, la mayoría de tarjetas presentan 30 FPS, pero otras alcanzan 60 y 100 FPS. Mientras mayor sea el número de imágenes que puede procesar la tarjeta de video por segundo, mejor será su rendimiento.
La memoria de video (Vram): se trata de un segundo elemento que permite optimizar el rendimiento de los gráficos de tu PC. Junto a los FPS, la Vram definirá la fluidez con la que pueden llegar a mostrarse las imágenes. Ya que, la memoria de la tarjeta de video dedicada deja libre la memoria RAM del ordenador para otras funciones.
Por lo tanto, este componente resulta ideal para ejecutar juegos que exigen una alta calidad gráfica y resolución. En este sentido, a la hora de ir tras una tarjeta de video dedicada, mira sus FPS y su Vram.
Conexiones: la tarjeta de video te permite conectar distintos dispositivos a través de sus puertos. Desde aquellos puertos para dispositivos tradicionales: VGA y DVI, hasta puertos para dispositivos de alta definición (HDMI).
Existen diferentes tipos de tarjetas de video o tarjetas gráficas (integrada o dedicada) en el mercado. Considera estas características a la hora de declinarte por aquella ajustada a tus necesidades.
Utilidad de la tarjeta de vídeo o tarjeta gráfica
Una tarjeta de video o tarjeta gráfica (integrada o dedicada) sirve para convertir y proyectar en un monitor la información generada en el CPU. Por lo tanto, mientras mayor sea la capacidad de la tarjeta de video y de la pantalla donde se proyecta la imagen, mejor será la calidad vidual de los gráficos.
Dicho en otras palabras, una tarjeta de video dedicada ayuda a la ejecución óptima de juegos y aplicaciones. Específicamente, aquellos juegos y programas que cuentan con animaciones 3D y un alto nivel de diseño gráfico.
Tipos de tarjeta de vídeo o tarjetas gráfica
Existen muchos tipos de tarjetas de video en el mercado. Su adquisición depende en gran parte de la necesidad del usuario. Es decir, si utilizas tu ordenador para juegos, programas de edición de videos o aplicaciones 3D, requieres activar una tarjeta de video dedicada GPU de buena calidad. Aquí te hablamos de dos tipos: las Nvidia y las AMD (las mejores según nuestra opinión y las más recomendadas).
- Nvidia: en la actualidad vemos frecuentemente que los ordenadores portátiles de gama media – alta cuentan con una tarjeta Nvidia integrada. Las cuales, son excelentes para gammers y diseñadores gráficos. Existen modelos de esta marca que ofrecen hasta 60 FPS con Vram bastante buenas, como la Nvidia 980. Estas tarjetas gráficas orecen una experiencia al usuario en cuanto a los gráficos de increíble nitidez y fluidez.
- AMD: esta marca ofrece una línea de tarjetas gráficas que brindan una buena relación en cuanto a precio y calidad. Sin embargo, no alcanzan los estándares de rendimiento de las tarjetas de video Nvidia.
¿Cómo saber si cuento con una tarjeta de video dedicada en mi PC?
Has comprado un computador (portátil o de escritorio) y realmente no estas seguro el tipo de tarjeta gráfica que posee. O, has instalado una tarjeta gráfica dedicada y no sabes si esta disponible en tu equipo. Y, te preguntas: ¿poseo una tarjeta gráfica integrada y otra tarjeta gráfica dedicada? ¿Cuál de ellas está activa y cómo se activa la tarjeta de video dedicada?
Es muy simple responder a estas inquietudes. Primero vayamos a la primera pregunta: ¿poseo una tarjeta gráfica integrada y otra tarjeta gráfica dedicada instaladas en mi ordenador? Para saber esto, simplemente dirígete a “Equipo” / “Propiedades” / “Administrador de dispositivos”.
Se desplegará una nueva ventana, pulsa sobre una de las primeras opciones: “Adaptador de pantalla”. Allí podrás observar las tarjetas gráficas instaladas en tu equipo. Si posees dos, la primera es la tarjeta de video integrada y la segunda es la tarjeta de video dedicada.
Ahora vayamos con la segunda pregunta…
¿Cómo activar la tarjeta de video dedicada?
Lo primero que debes hacer es descargar e instalar los controladores de la tarjeta de video dedicada que posee tu equipo. Lo recomendable es hacerlo manualmente. Para ello, puedes dirigirte al sitio web del fabricante de tu tarjeta de video dedicada (Nvidia, AMD, INTEL o ATI). Allí, ubica el driver o controlador más actualizado para tu dispositivo. Descarga el software y procede a instalarlo en tu PC.
Posteriormente, haz un clic derecho sobre el escritorio y selecciona el “Panel de control de NVIDIA”.
Luego pulsa sobre “Configuración 3D” y elige “Controlar la configuración 3D”. Allí, ve hasta la opción “Procesador de gráficos preferido” y selecciona la tarjeta de tu preferencia para ser la predeterminada.
Podrás escoger entre «Gráficos integrados» o la tarjeta de video dedicada (Procesador NVIDIA de alto rendimiento). O, incluso, existe el modo hibrido (automático u “Optimus”), que se ajustará dependiendo de las exigencias del proceso. Por último, presiona el botón “Aplicar” para guardar los cambios.
Al seleccionar la tarjeta gráfica Procesador NVIDIA de alto rendimiento, el sistema indicará al controlador de Nvidia que utilice solamente la tarjeta de video dedicada para todos los procesos.
Este procedimiento aplica en ordenadores que poseen sistemas operativos de Windows 7, Windows 8 y Windows 10. Luego de ejecutar estos pasos, puedes probar que se encuentra activa y predeterminada la tarjeta de video dedicada de la siguiente manera:
- Selecciona y pulsa clic derecho en el icono del programa o juego que deseas ejecutar.
- Dirígete a la pestaña “Ejecutar con procesador gráfico”.
- Corrobora que se encuentre “predeterminado” la opción “Procesador NVIDIA de alto rendimiento”. Y no la opción de “Gráficos integrados”.
¿Cómo activar la tarjeta de video dedicada desde la BIOS?
Otra forma de activar una tarjeta de video dedicada, es mediante la BIOS del computador. Simplemente debes seguir los siguientes pasos:
- Reinicia el sistema operativo y cuando este entrando nuevamente presionada la tecla “Supr” antes de que aparezca el logo de Windows.
- Con lo cual entrarás a la ventana de opciones de la BIOS. Allí, selecciona la pestaña “Configuración” y pulsa sobre “Ajustes gráficos”.
- Al entrar al apartado correspondiente a los ajustes gráficos, selecciona la tarjeta de video dedicada y guarda los cambios.
Desactiva la tarjeta gráfica integrada del procesador
Es aconsejable desactivar la tarjeta gráfica integrada del equipo con el fin de evitar conflictos durante la ejecución de aplicaciones. Para ello, sigue los pasos que te dejamos arriba para activar la tarjeta de video dedicada mediante su Configuración global.
Por otra parte, es importante acotar que los dispositivos “Nvidia” poseen la tecnología “Optimus”. Función que se comentó anteriormente y que sirve, para alternar el uso de la tarjeta de video integrada o dedicada de manera automática.
Por último, si tu computador cuenta con un procesador AMD Ryzen, entonces no le des tantas vueltas. Ya que, los computadores que poseen este tipo de procesador no cuentan con tarjeta de video integrada, por lo que no tendrás que deshabilitarla. Y, si se trata del Ryzen APU, que sí la posee, el sistema activará automáticamente la tarjeta gráfica dedicada.
Esperamos que esta información sobre cómo activar la tarjeta de video dedicada te sirva de mucha utilidad. Es una duda que ha muchos se nos presenta y la solución es bastante simple. ¡Suerte!